Chicos y chicas, se acabó el soñar con Elsa Pataki y Cesc Fábregas invitándote a cenar. ¡Ahora una agencia de viajes lo consigue solo para ti! O al menos esa suerte tiene la chica rubia del spot que la agencia Iberostar lleva a cabo estos últimos meses. ¿Antonio Banderas en un caballo negro? ¡Eso esta hecho!
Iberostar se formó hace más de 50 años como una pequeña agencia de viajes familiar mallorquina, y ha pasado a ser una de las principales agencias de viajes a nivel internacional. Opera en más de 19 países del mundo y cuenta con una plantilla de unas 23.000 personas.
Para su nueva campaña ha decidido contratar al conocido actor Antonio Banderas, y han rodado el spot con el que se promociona desde hace unos meses en TV. El anuncio se grabó en un hotel de
la Rivera Maya llamado Gran Paraiso, considerado el mejor hotel de lujo del Caribe y Mexico.
Unas vacaciones de ensueño, con todas las comodidades, facilidades, tranquilidad, paisajes, playas, montes, actividades, con la confianza y el trato que el cliente se merece, el disfrute asegurado y el mejor precio. Esto es solo una parte de lo que Iberostar ofrece a sus clientes. ¿Se puede pedir algo más para tener unas vacaciones perfectas?
La agencia juega con el flashback para hacer más emociontante el anuncio. De esta forma el espectador no sabe hasta el final porque Antonio Banderas recibe una llamada durante el rodaje de su última película y sale corriendo. Coge un coche más largo que el número Pi que le lleva hasta su avión privado dirección Mexico. Cuando llega a su destino se sube en un taxi pero el atasco no le deja continuar, por lo que decide seguir su camino robando una moto 500cc que por inmensa casualidad esta aparcada justo allí. Le persiguen unos perros asesinos pero aún así Antonio no pierde la compostura, es tan varonil….... (suspiro de mujer enamorada). Llega a un hotel donde se sube en un caddy mientras atraviesa un fantástico y enorme campo de golf a más de 2000 km hora, por lo que se agarra con fuerza pero siempre con elegancia y llega a una piscina más grande que Asia donde mira con cara de “mirar que guay soy que voy tan rápido y ni me despeino”. Alli se sube a un precioso caballo negro como quien come pipas y atraviesa una playa paradisíaca.
Todo esto hace que el espectador este súper intrigado en su casa pensando porque Antonio tiene esta actitud, y a recorrido un camino tan largo superando con la máxima rapidez todas las terribles dificultades que le han ido surgiendo ¡algo muy muy muy importante tiene que pasar!
Es entonces cuando la escena vuelve dos horas antes y se escucha una conversación entre dos chicas tumbadas en una amaca de una playa paradisíaca de México. Están tan contentas con sus vacaciones concertadas con Iberostar que comentan entre risas lo único que falta para que sus vacaciones sean realmente de ensueño, un deseo que consideran totalmente imposible ¡Que aparezca Antonio Banderas en un caballo negro! dando a entender que la agencia ha conseguido hasta ese momento todo lo que las chicas han querido.
Pues si señores, el actor llega a la playa y se planta delante de las chicas mientras estas no se creen lo que estan viendo.
Para Iberostar nada es imposible, y su objetivo es contentar al cliente, le pida lo que le pida, aún siendo algo tan increíble.
También es importante que Banderas muestra una actitud muy activa ante la situación, es decir, confía en Iberostar. Es lo que se llama una publicidad con el reclamo de un famoso. Si Antonio Banderas confía en Iberostar ¡yo también!
Asique se acabaron esas vacaciones en Benidorm con los abuelos donde lo más emocionante del verano es quién gana al chinchón. ¡Ahora todo es posible! Iuuuuuuuuuujuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuu
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